Una política de aparcamiento que desincentive el uso de coches y motos.
Un sistema de aparcamientos que no potencie la movilidad en coche. La zona azul y la mayor parte de las plazas disponibles en los parkings públicos subterráneos de Cádiz tienen carácter rotatorio: disuaden de aparcar en ellas a los residentes y a los usuarios que quieren hacerlo durante más que unas horas, en favor del uso breve de las mismas por un alto número de vehículos. Nuestra propuesta invierte el modelo: buscamos reducir el número de plazas de aparcamiento en rotación en favor de los residentes. Esta medida ya se incorporó en el PGOU de 2012. El objetivo es facilitar un nuevo reparto modal en el que el uso del coche privado tenga menos peso: a menor expectativa de encontrar aparcamiento, menor uso del coche en favor de otros medios.
No más aparcamientos subterráneos en el casco histórico. La construcción de nuevos aparcamientos subterráneos en el casco histórico, incluso si se dedicaran en su mayor parte a uso por residentes, aumentaría de modo automático el número de desplazamientos en automóvil. El nuevo PGOU debe corregir el PGOU vigente -en este aspecto del todo incoherente con los principios que el mismo plan establece- eliminando la posibilidad de construir nuevos parkings subterráneos en el casco histórico.
+ info. Medidas previstas en el PGOU en relación con los aparcamientos en rotación.
Eliminar el estacionamiento de motocicletas en áreas acústicamente saturadas o con carácter residencial. Las áreas de aparcamiento para motos habilitadas en el interior de la almendra central del casco histórico favorecen su penetración; proponemos desplazar las áreas de aparcamiento al perímetro o potenciar el uso de los aparcamientos subterráneos perimetrales. Esta última medida estaba ya presente en el PGOU (2012).
+ info. Medidas previstas en el PGOU en relación con el aparcamiento de motocicletas. En esta ficha puedes consultar cuáles son las medidas concretas que avanza el plan en relación con el aparcamiento de motocicletas en el casco histórico.
Una política de tráfico que reste fluidez a la circulación en automóvil
Reducción del número de carriles para coches. Reducción de la anchura del viario. Reordenación de los tiempos semafóricos. Eliminación de los cajones de las paradas de autobuses. Itinerarios de circulación disuasorios.
Política en favor del transporte público, la bici y los desplazamientos a pie.
Transporte público competitivo respecto al coche. Tanto a nivel urbano como a escala metropolitana el transporte público ha de ser competitivo respecto al coche tanto en relación a los tiempos de desplazamiento como en relación al coste para el usuario. Para conseguirlo, además de desincentivar el uso del coche privado, es necesario:
- Privilegiar al transporte público en el uso del viario de circulación habilitando plataformas reservadas en las carreteras de acceso a Cádiz y en las avenidas, sustituyendo las paradas en cajón por paradas en el carril de circulación, eliminándo las bandas de aparcamiento en las avenidas y programando los semáforos en ciclos cortos; en este sentido, la línea 1 puede pasar a ser una línea BRT (autobús de tránsito rápido), sistema que combina la calidad del tren-tranvía con la flexibilidad del autobús
- Mejorar el servicio de transporte público en sí mismo, revisando las actuales líneas en itinerarios, horarios y frecuencias, impulsando la mejora de la red ferroviaria de cercanías, y poniendo en marcha las dos líneas de tren-tranvía proyectadas para la Bahía.
Red completa de vías ciclistas a nivel urbano y metropolitano. En calzada, que nunca reste espacio peatonal. Combinada con una política de aparcamiento. Bicicletas de uso compartido.
Itinerarios peatonales. Calles residenciales
Una política de movilidad que favorezca la intermodalidad
Combinación de modos. Nudos intermodales. Aparcamientos disuasorios + transporte público + movilidad activa. Transporte público + bici, patinete, a pie.